CEMBADA: Zanja en cada uno de los lados de un camino o tierra de labranza para recibir y desaguar las aguas (DEL VOCABULARIO PARAMES).
De igual forma que la "Cembada" este BLOG va recibiendo las aguas de mis impulsos e ideas.

miércoles, 21 de julio de 2010

Excursión a Argovejo (León)

En plena montaña de León se encuentra Argovejo, hermosa "villa" a la cual se accede desde Cremenes, camino de Riaño por la carretera N.601 (desde Mansilla de las Mulas).
Atravesando el puente en Cremenes se accede a la estrecha carretera que nos conducirá directamente a Argovejo.
Durante la ascensión, a la izquierda, nos encontramos con la "Ermita de Ntra. Sra. de Pereda", obra moderna que sustituyo al antiguo monasterio de San Martín de Pereda del cual hay constancia desde 1020. Al lado podemos descansar en la fuente.

Ya en Argovejo cruzamos el puente sobre el arroyo (o río) "Llampas" y nos dirigimos a la acogedora y rehabilitada casa de mis primos. Ahí será donde pasaremos este fin de semana y desde donde saldremos guiados por David hacia dos rutas que realizaremos acompañados por su hijo, también llamado David.

La primera ruta sera la llamada por mi primo "Ruta del nacimiento del rio". Salimos por la tarde después de reposar una sabrosa comida preparada por Fatima la mujer de David. Vamos remontando el río y dejando a nuestra izquierda las huertas y huertos del pueblo. Así llegamos a la "Cuevina de la Virgen" (alguien del pueblo trajo una imagen de la Virgen de Covadonga y la ubicó ahí).




Poco después ya empezamos a caminar entre los hayedos y vamos descubriendo unos preciosos paisajes y caídas de agua.









En una zona del hayedo nos encontramos con un "Belén" situado en una pequeña cueva horadada en la roca y alguna antigua bola de arbol de Navidad colgando de una haya:






Remontando el río se llega a un punto que ya no es posible seguir con los medios normales, la estrechez y lo escarpado del terreno obligan a utilizar otros medios más apropiados con los cuales no contábamos.






Volvemos sobre nuestros pasos y regresamos disfrutando del paisaje, el agua y las fresas silvestres que vamos encontrando.


En toda la zona es fácil encontrar fósiles que siempre llaman la atención. Dedicamos a su búsqueda un rato, antes de ponernos a cenar ascendiendo por el camino que lleva al cementerio.

Tras la cena y una agradable charla alrededor de la mesa salimos a dar un paseo nocturno y observar el impresionante cielo estrellado reconociendo algunas estrellas y la "Vía Láctea", cosa que en otras zonas es difícil distinguir dada la excesiva luminosidad del alumbrado callejero.

Y con esto acaba la primera jornada y el dormir se nos hace indispensable para poder realizar la ruta del día siguiente que sera bastante más dura y larga: "Ruta del Pozo de la Nieve" o "Ruta del Puerto de Tejedo".


"Ruta del Pozo de la Nieve"
A las nueve de la mañana del domingo nos pusimos en marcha para realizar esta dura ruta (para quien no está muy acostumbrado a la montaña). La primera parte del camino coincidía con la realizada el sábado por la tarde, pero antes de entrar en el hayedo nos desviamos hacia la derecha cruzando el río y comenzando a subir por las laderas de las montañas. Íbamos en dirección del "Puerto de Tejedo", zona que atravesaban los pastores de ovejas, que venían desde Extremadura, para llevarlas a pastar a los prados, propiedad del pueblo y que este les alquilaba. Subimos entre hayedos y llegamos al alto donde encontramos una zona angosta que utilizaban los pastores para contar sus ovejas. La zona era propicia para ello ya que obligaba a pasar las ovejas de una en una: El Contadero.




Una vez pasado "El Contadero" aparece ante nosotros una gran extensión de pastizales en la cual podemos observar los restos de apriscos y chozos donde descansaban ovejas y pastores.

Al otro lado se eleva la montaña donde buscaremos nuestro objetivo: "El Pozo de la Nieve". Nos resulto un poco complicado dar con él, pero gracias a las señalizaciones que otra gente fue dejando mediante pilas de piedras dimos con él, no sin antes habernos perdido varias veces.





En el pozo y pese a estar a mediados de Julio podemos ver aún la nieve que en otros tiempos venia a buscar la gente del pueblo para hacer los helados durante el verano.

Objetivo conseguido y vuelta a casa. Descendimos la montaña y tomamos el camino de vuelta hacia Argovejo. Una ducha y a comer.

Lastima que se acabe el fin de semana y haya que volver a casa, se queda uno con ganas de hacer mas rutas. Esperemos volver en otra ocasión.

Aquí terminamos no sin antes dar las gracias al "David grande", al "David pequeño " y a Fatima por su estupenda acogida y compañía.